Francisco hará lo que no hacen otros: ocuparse de los que menos tienen

Por Enrique Larrousse

Bien por Francisco. Va donde su mensaje es recibido como prioridad. Visita los países hermanos del continente sur, en una clara estrategia política. Porque el máximo jerarca del catolicismo es un jefe de estado. Un primer status ineludible. Y como jefe de estado, es político.

Desde que tengo memoria y aún antes, según narraban mis mayores, los pontífices marcaban con claridad la línea política de la iglesia que dirigían. De esa forma, si estudiamos puntillosamente las gestiones papales de Juan XXIII, Paulo VI, Juan Pablo II, Benedicto XVI, y lo que va de Francisco I, veremos en todas sus manifestaciones cuáles fueron sus políticas y cómo delinearon las prioridades de las mismas.

Se da una curiosa circunstancia respecto del príncipe máximo del cristianismo universal, hoy investido en la persona del cardenal Bergoglio: algunos argentinos lo desprecian por su perfil ideológico. Es un peronista. Y un peronista que ha llegado a la máxima jerarquía eclesiástica. Ciertamente inadmisible para quienes lo detractan por ello.

La enorme mayoría de la grey católica argentina ignoró en su momento que Karol Jósef Wojtyla en su juventud militó en el comunismo y que Joseph Aloisius Ratzinger en el otoño de su adolescencia tuvo fugazmente una simpatía filo-nazi. Ambos curas, llegaron a pontífices. Ambos papas, precedieron a Jorge Mario Bergoglio en la sede romana. Los mismos que no pueden digerir el perfil ideológico del papa argentino, jamás deploraron a viva voz el pasado de sus antecesores. Y no quiero ir más atrás en la historia, pero nos encontraríamos con llamativas curiosidades de índole político en las gestiones pontificias.

En fin…… FRANCISCO es hoy, en el contexto de la trascendencia pública, quien alza la voz como nadie para denunciar los males y horrores del capitalismo. Y en tal sentido toda la sociedad del mundo, trasponiendo los límites religiosos y políticos, lo aplaude y le agradece el desafío que tomó. Debiéramos darnos cuenta. Creo que los argentinos debemos dejar la visión pequeña de la interpretación política local para ver lo profundo de la crisis política global, visión que no solo el papa esgrime con preocupación, sino todos los líderes del mundo que se preocupan por lo social. Debiéramos sacudirnos del cuerpo el escozor mezquino de creer que un pontífice está en la «jugada sonsa del partido de barrio» para verlo «jugar la final del mundo» a la que fue llamado por su investidura.

No dejemos pasar el momento de la historia universal para que el mismo no nos encuentre poniéndonos la camiseta de la cortedad. Entender sin odiosos reojos que ÉL está disputando en el contexto de las naciones la más grande lucha que un cura puede dar en contra del gran poder económico organizado, que no tiene patria pero sí adeptos, y que es el verdadero mal que va destruyendo la sociedad.

La prioridad de FRANCISCO no es mediar o tomar partido en la rotura de cuernos en la que hemos incurrido los argentinos de doscientos años al presente. Por supuesto que tiene su posición tomada, malo sería que fuese un híbrido. Pero La HORA DE LA HUMANIDAD le exige otra cosa, mucho más justa, mucho más inclusiva, mucho más cristiana, mucho más urgente. Y ÉL, lo ha asumido. No olvidemos que, contra toda la interna de la iglesia y del laicismo, es nada más ni nada menos que un JESUITA.

Su Maestro de apostolado profesional, es el mío y el de millones en el testimonio de la FÉ laica…. El mismo!! El mismo que hoy también se rebelaría y echaría a los «mercaderes del templo» y por supuesto también sería calumniado por la maldad mediática del tercer milenio. El mismo Maestro que nos hizo comulgar con pureza de niños, cuando creíamos en la humildad y en la justicia social. El mismo que, ni más ni menos, murió crucificado por el poder total.

Hoy, FRANCISCO como discípulo elegido entre millones, es un cura argentino que besa su tierra desde la oración y para siempre, aunque nunca más vuelva a pisarla. ÉL siempre estará para hacer lo que no hacen otros: ocuparse de los que menos tienen.

Por Enrique Larrousse

—————————————————————————————————————
Comunidad InfoBrandsen
info@infobrandsen.com.ar
Seguinos en FaceBook: InfoBrandsen
Seguinos en Twitter: @InfoBrandsen