Ha sido un éxito la segunda temporada de El Juego del Calamar, que tuvo sus inicios con la primera entrega, allá por 2021 en la plataforma “On Demand” de la N. Este “BOOM” puede ser explicado por la expectativa que generó la primera parte, dejándonos un final abierto para darle continuidad; sin embargo, el recurso del género “Battle Royale”, donde varios personajes compiten entre sí en un lugar cerrado hasta que quede uno en pie por un premio, la gloria o simplemente sobrevivir, a costa de su integridad física, moral y/o psicológica ya estuvo bastante explotado anteriormente: La trilogía de libros de Suzanne Collins y su adaptación cinematográfica de “Los juegos del Hambre”, donde la autora apunta a un público juvenil, no tiene ese gore (desparramo de sangre y vísceras), pero de todas maneras tiene escenas bastantes crudas y retorcidas.
“The Running Man”, un libro de Stephen King publicado en 1982 bajo el seudónimo de Richad Bachman, en Argentina pudimos ver la adaptación cinematográfica llamada “El fugitivo”, protagonizada por el varias veces campeón Mr. Olympia, Arnold Schwarzenegger. Y para mí, la obra magna, que además, bautiza el concepto de este género, es sin duda “Battle Royale” del japonés Koushun Takami, la cual solamente tuve la oportunidad de poder leer la adaptación al manga (historieta japonesa), pero su serialización es apuntada a la demografía Seinen, o sea, un público adulto con temáticas complejas, a tal punto que las imágenes son de violencia y sexo explícito, y mucho gore (demasiado diría yo); tuvo su adaptación cinematográfica y se la cataloga como “de culto”.
Sin más, analicemos el juego del Calamar 2. ATENCIÓN, A PARTIR DE AHORA PUEDE HABER SPOILERS DE LA PRIMERA TEMPORADA, SIN EMBARGO, HARÉ UN ESFUERZO POR NO ADELANTAR DETALLES DE ESTA SEGUNDA ENTREGA. CONTINUEMOS:
En la primera temporada vimos como el protagonista Seong Gi-hun, o jugador 456, es internado en una isla con otros 455 participantes con la promesa de ganar un premio millonario de 45.600 millones de Wones (moneda surcoreana) que serían en dólares: 31 millones aproximadamente. La idea sonaba tentadora, hasta que al ir atravesando las distintas pruebas, los jugadores irán muriendo de forma brutal hasta que solamente quede un solo ganador. En esta entrega Seong intentará vengarse de los organizadores de tan macabro juego a toda costa, incluso reinsertándose como jugador si es posible.
La serie expone las miserias de la humanidad como el egoísmo, la apatía, la avaricia, la intolerancia y el desapego en un modelo y/o sistema que exacerba estas particularidades a través del apuntalamiento de la competencia. Claro que los jugadores no están justamente ahí porque rebosen de capital económico; todos tienen una peculiaridad: son morosos de deudas millonarias y la presión que ejercen sus acreedores amenaza con su bienestar social, psicológico y físicos de ellos o familiares.
A través de la serie vamos a ir conociendo las historias de distintos personajes que están sometidos a una actualidad, te diría, insoportable: Es recurrente el endeudamiento por el juego. La ludopatía es un tema central, y principalmente es el gancho para reclutar jugadores, en la desesperación por obtener una mejor vida financiera han dejado todo, y todo lo van a dejar (incluso sus vidas) por salir de la ignominia que están padeciendo. Algo me llamó poderosamente la atención, se hace mención de las pérdidas materiales de algunos personajes a través de la especulación con las criptomonedas por sugerencias de “influencers”, no es un dato menor en un mundo donde se fomenta el “ser tu propio jefe”, “tener formación financiera” e “invertí en nuestra APP para hacer dinero”, donde abundan las estafas de esquema ponzi, la serie aquí está mandando mensajes subliminales de alerta.
Un dato más: el protagonista, goza de una integridad revolucionaria a pesar del entorno, en cierto momento, divididos los jugadores en bandos, y teniendo la posibilidad de someter al otro grupo de forma coercitiva, sabe que su objetivo son los organizadores y apunta todas sus energías ahí. Es solidario aconsejando a los demás sobre cómo superar escollos para sobrevivir. Se alza como vocero para persuadir a los sobrevivientes de no continuar y no darle entretenimiento a un puñado de ricachones hastiados de su opulencia. Genera vínculos con los demás y es piadoso con sus contrincantes.
Considero que la serie merece ser vista, sin embargo, como ya dije, no es un material renovador. Le doy 3 de 5 puntos
AVANCE OFICIAL DE LA SERIE
Por Ulises Gallinares
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